domingo, 4 de septiembre de 2011

Las rarezas mercantiles del Atlético



Pato Sosa, Avi Nimny o Pilipauskas son sólo algunos de los fichajes de infausto recuerdo que planean por la grada de los lamentos del Atlético de Madrid, donde sus aficionados ven con mezcolanza de resignación y rabia los designios de su club y la deriva a la que está sometido desde el sillón presidencial. Las operaciones de compra y venta de futbolistas en el Calderón dejan siempre tras de sí un halo de desconfianza y dudas acerca de su idoneidad, y lejos de menguar, cada año que pasa se confirman los peores augurios. Este verano no ha sido una excepción.
No sé si recordarán los nombres de Lawal, Lima, Maxi —no confundir con el argentino que llegó del Espanyol—, o Djana. Perfectos desconocidos que arribaron al Manzanares por un módico precio de 2.000 millones de pesetas. Operaciones rocambolescas caídas en el olvido y guardadas en el cajón de los desastres. Las cosas no han cambiado demasiado. Por las oficinas del Atlético de Madrid continúan desfilando contratos de jugadores desconocidos sin que nadie sepa muy bien el porqué de las contrataciones. Lejos de los focos que iluminan a las estrellas como Agüero, De Gea, Forlán, Diego o Falcao, conozcamos otras operaciones veraniegas que no han trascendido tanto como los mencionados...
fuente original

No hay comentarios:

Publicar un comentario